La pasada primavera veíamos cómo hay gente que se resiste a volver a la oficina por mucho que insistan sus empresas y que lo logran a golpe de sentencia en España y hacíamos un resumen de casos en los que la gente había demandado a su empresa para no volver a la oficina, porque esto podría suponer un grave problema en sus vidas.
No solo los españoles están demandando a empresas para poder seguir trabajando en remoto. También está sucediendo en el Reino Unido. The Guardian, uno de los más importantes periódicos británicos, ha recogido historias de empleados que comparten cómo recurren a los tribunales en medio de una creciente resistencia a las directivas de volver a las oficinas.
Para millones de empleados del Reino Unido, el cambio hacia el trabajo remoto provocado por los confinamientos por el coronavirus simplemente significó un mejor equilibrio entre la vida personal y laboral, pero para personas que se tienen que encargar de cuidados familiares, esto supuso una mejora en la calidad de vida y hasta un “salvavidas” como explica una administradora cuyo marido tiene una discapacidad y depende de ella para recibir toda la atención que necesita al día.
No hay que olvidar que el teletrabajo puede fomentar la natalidad y que las parejas se olviden de relaciones a distancia y hay estudios que lo demuestran.
Volver a la oficina sin necesidad
Esta persona entrevistada se llama Emma y cuenta que incluso después de que se levantaron las restricciones por la Covid en 2021, continuó trabajando principalmente desde casa, hasta que el otoño pasado le dijeron “de la nada” que tenía que asistir más a la oficina, aunque dice que no se habían reportado problemas con su producción. Ella comenta que en su ciudad, contratar a una persona para que se encargue de los cuidados cuesta 35 libras a la hora, lo que es inasequible y decidió dimitir.
La mujer, que dice que la empresa no daba razones de peso para explicar la necesidad de volver a la oficina. Y, por tanto, ha presentado una demanda legal por despido y llevará su caso a un tribunal laboral. Ella se encuentra entre muchas personas (algunas empleadas por grandes marcas británicas, otras por empresas más pequeñas o en el sector público) que compartieron con The Guardian sus dificultades con la necesidad de volver a la oficina.
Muchos de estos empleados afirman haber presentado quejas internas después de que se les pidiera que trabajaran desde la oficina, ya sea a tiempo completo o parcial en modo híbrido, y algunos dijeron que estaban emprendiendo acciones legales contra su empleador o que considerando hacerlo. Otros dijeron que habían optado por el despido voluntario por este motivo. Algunos empleados sintieron que sus empleadores los habían tratado injustamente y puede que ilegalmente (los tribunales tendrán que hablar en los casos de denuncias) cuando se les pidió que regresaran a la oficina sin previo aviso.
Cabe recordar que a principios de este año, un juez de un caso en un tribunal laboral falló en contra de la solicitud de un alto directivo de la Financial Conduct Authority de trabajar desde casa a tiempo completo.
Gente que vive lejos de la oficina
Por otro lado, una trabajadora de la administración ha contado que tuvo que renunciar a su trabajo hace unas semanas después de que la amenazaran con medidas disciplinarias si no empezaba a viajar cientos de kilómetros hasta la oficina con efecto inmediato.
Como sucedió en empresas como Amazon y sus empleados, la mujer se había mudado de ciudad asumiendo que el teletrabajo se mantendría. Ha solicitado asesoramiento jurídico para acudir a un tribunal laboral porque cree que no se avisó con suficiente antelación.
Una joven de 28 años del sur de Inglaterra, fue una de los varios encuestados que dijeron que habían sido contratados para puestos totalmente remotos durante o incluso antes de la pandemia y ahora mes mandaban ir a la oficina. Eso no es algo aislado. En Genbeta hemos visto cómo es algo muy común.
Las razones para querer trabajar de forma remota al menos parte del tiempo incluían responsabilidades de cuidado, viajes escolares, problemas de salud o desplazamientos costosos y que requerían mucho tiempo.
Las oficinas son “ruidosas”
Además, algunas de las personas que han hablado con The Guardian afirman que los argumentos de que trabajar en la oficina eran mejor para la productividad se veían socavados por el hecho de que sus oficinas o lugares de trabajo eran lugares con demasiado ruido o que tenían un número limitado de escritorios que debían reservarse con anticipación.
El alto costo de vida fue la razón más común dada para oponerse a un regreso a la oficina a tiempo completo o casi a tiempo completo. Trabajar desde casa, dijeron los encuestados, les había permitido deshacerse de los automóviles, reducir los costos de cuidado de los niños, ahorrar miles de dólares en viajes en tren, gasolina y costos de estacionamiento, o incluso mudarse a áreas más baratas.
Imagen | Foto de abdullah ali en Unsplash
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La noticia Demandar a la empresa antes que volver a la oficina: trabajadores cuentan por qué han tomado esta drástica medida fue publicada originalmente en Genbeta por Bárbara Bécares .
