Amazon anuncia que el próximo 8 de junio, todos los dispositivos de la compañía (asistentes domésticos Echo, cámaras Ring, etc.) en los Estados Unidos se conectarán automáticamente, si sus usuarios no dicen lo contrario, en una red inalámbrica mesh mediante Bluetooth y señales de radio en la banda de 900MHz, Amazon Sidewalk, destinada a ofrecer funciones de IoT. Una red que no utilizará demasiado ancho de banda – según la compañía, el ancho de banda máximo de un Sidewalk Bridge al servidor de Sidewalk es de 80 Kbps, y el total de datos mensuales utilizados por cuenta tiene un límite de 500 MB, pero que funcionará en modo opt-out: todos los dispositivos se conectarán a ella salvo que el usuario cambie expresamente esa configuración.
¿De qué estamos hablando? Básicamente, de crear auténticos barrios conectados de forma inalámbrica, en los que, por ejemplo, poder localizar rápidamente cualquier objeto que lleve un dispositivo Tile, aunque parece poco probable que las ambiciones de Amazon terminen ahí. De hecho, Amazon afirma que puede usarse también para facilitar la conexión con dispositivos alejados de nuestra propia WiFi. Las conexiones de los dispositivos con la red son gratuitas, pero están diseñadas para soportar un ancho de banda pequeño, lo que indica claramente una vocación por el entorno IoT. Además, la compañía ofrece Sidewalk Developer Service (SDS), una colección de chipsets de silicio aprobados junto con placas de desarrollo, kits de desarrollo de software de dispositivos (SDK), herramientas de aprovisionamiento de dispositivos, documentación técnica y una integración en la nube para desarrolladores que quieran aprovechar la funcionalidad de Amazon Sidewalk, lo que indica que, como con casi todo lo que hace, la compañía tiene intención de crear una plataforma para terceros.
Pensemos que tan solo en los Estados Unidos, el número de asistentes inteligentes y dispositivos de la gama Amazon Echo, la ubicua Alexa, excedía en 2019 los cien millones de unidades, con una cuota de mercado de en torno al 70%, mientras que las cámaras de seguridad, video-timbres inteligentes y alarmas de Ring vendieron más de 1.4 millones de unidades tan solo en 2020. Hablamos de una red potencialmente enorme, y eso sin contar todavía con muchos otros dispositivos de la compañía, desde libros electrónicos Kindle, tabletas Amazon Fire, reproductores de contenido para televisión Fire stick, o routers mesh Amazon Eero, a incluso otros más minoritarios, como Key by Amazon para facilitar la entrega de paquetes en garajes.
Resulta curioso pensar en una red de este tipo y con estas dimensiones conectándose de repente el próximo 8 de junio, y convirtiendo potencialmente a Amazon en un actor importante dentro del mundo IoT. Considerando las múltiples vulnerabilidades de seguridad que han ido surgiendo en los distintos protocolos de comunicaciones a lo largo de los años, tendería a pensar que cualquiera que oiga hablar del tema tendría incentivos para dirigirse al menú correspondiente en la app de Alexa y deshabilitar esta funcionalidad, o al menos esperar a que la compañía la justifique para los propietarios de sus dispositivos de una manera algo más convincente. Pero como Amazon sabe perfectamente, la inmensa mayoría de los usuarios nunca cambian las configuraciones que sus dispositivos traen de fábrica por defecto y tampoco leen especialmente noticias relacionadas con ese tipo de temas, lo que lleva a creer que el despliegue de Amazon Sidewalk el próximo 8 de junio en los Estados Unidos será seguramente un éxito. Fuera de los Estados Unidos, por el momento, la opción ni siquiera aparece en el menú de la aplicación, lo que indica que el despliegue tardará algo más de tiempo en producirse.
¿Qué pretende Amazon, en último término, con la creación de Amazon Sidewalk?
