Espacio

SpaceX recibe permiso para el segundo lanzamiento del Starship


El segundo Starship completo listo para volar – SpaceX

Una vez que el Servicio de Pesca y Vida Silvestre de los Estados Unidos (FWS por sus siglas en inglés) emitió su informe sobre el sistema de supresión de calor y sonido mediante agua de la plataforma de lanzamiento del Starship en el que concluyó que no se espera que afecte negativamente al entorno la Administración Federal de Aviación de los Estados Unidos (FAA) ya tenía todas las piezas para dar permiso para el lanzamiento del segundo Starship de SpaceX. Y así lo ha hecho.

Con lo que la empresa trabaja ahora mismo para lanzar el Starship compuesto por el Booster 9 (B9, la primera etapa) y la Starship 25 (S25, la segunda etapa) en una ventana de dos horas que empieza el viernes 17 a las 14:00, hora peninsular española (UTC +1). SpaceX iniciará la retransmisión del intento unos 35 minutos antes.

Se adelantan en un par de meses a mis previsiones, que iban en la línea de que no veríamos ese segundo vuelo hasta 2024. Pero hay prisa por parte de todas las partes implicadas.

Conocido como Starship Integrated Flight Test-2 (Prueba de vuelo integrada 2 del Starship), los objetivos principales del lanzamiento son los mismos que los de el anterior:

  • Si todo va bien la Starship 25 amerizará a velocidad terminal sin tan siquiera intentar frenar, aunque en vuelo controlado, cerca de Hawaii 90 minutos después del despegue tras dar unos 3/4 de vuelta a la Tierra. Esto permitirá comprobar el encendido y el funcionamiento de sus motores después de la separación de la primera etapa, algo que nunca se ha hecho antes, del sistema de maniobra orbital, y de su escudo térmico.
  • Por su parte el Booster 9 intentará un amerizaje suave en el Golfo de México al estilo de las primeras pruebas de SpaceX para recuperar la primera etapa de los Falcon 9. Una vez en el agua se abrirán las válvulas de los depósitos para que el B9 se llene de agua y se hunda. Aunque en caso de que no lo haga por sus propios medios SpaceX se encargará de conseguir que se hunda.

Pero para llegar ahí el conjunto tiene que despegar de una pieza y ambas etapas han de separarse correctamente, entre otra miríada de cosas.

Para intentar asegurar el éxito del lanzamiento SpaceX ha hecho tanto cambios en el cohete como en el perfil de vuelo y en el proceso de lanzamiento.

B9, por ejemplo, usa actuadores eléctricos para mover las toberas de sus motores en lugar de un sistema hidráulico, lo que en principio es más fiable y debería evitar los problemas de control de dirección experimentados en el primer vuelo; la secuencia de despegue ha sido modificada para que los motores Raptor de la primera etapa alcancen antes su potencia de despegue para alejar el cohete antes de la rampa en caso de que empiecen a saltar restos como sucedió en el primer vuelo; además SpaceX ha instalado el ya citado sistema de supresión de calor y vibraciones mediante agua para minimizar el riesgo de que salgan restos despedidos; y la separación entre etapas se hará en caliente, no mediante un giro como se iba a haber intentado en el primer lanzamiento de haber llegado tan lejos.

En cualquier caso nadie sabe cuántos de los objetivos de la misión se cumplirán, aunque es muy probable que no todos. Así que habrá que sacar las palomitas y ver qué pasa.

La entrada en servicio del Starship es muy importante para SpaceX no sólo porque es una pieza fundamental de cara a seguir con el despliegue de los satélites de la constelación Starlink sino porque también es una pieza fundamental de los planes de la NASA para poner una tripulación sobre la superficie de la Luna en la misión Artemisa III. El aterrizador de esa misión está basado en el Starship.

# Enlace Permanente

Related Articles

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Back to top button