Noticias

¿Deberíamos seguir publicando en internet de forma gratuita?

Vamos amigas y amigos con el resumen de tendencias semanales en tecnología. En esta edición empezamos primero con una recomendación publicitaria:

Una forma de dejar de odiar los seguros

Tener un seguro no es estar condenado al modelo tradicional: atrapado un año, subidas continuas, problemas cuando toca responder. Tuio, el seguro 100% digital que pagas mes a mes, pensado para gente como nosotros: digitales, innovadores, millennials (como poco). En Tuio no te venden la moto: tienes una mensualidad, para cubrir cualquier problema que tengas, y ya está. Por supuesto, esto te sonará raro, porque las demás no son así. Si quieres calcular cuánto pagarías con Tuio, haz clic aquí. Te dan precio en el momento.

OpenAI tiene un problema estratégico en forma de iPhone

Hemos discutido y apostado por la inteligencia artificial como la siguiente gran plataforma tecnológica, con un referente inicial que es OpenAI y que así lo ha entendido: su gran negocio no sería tanto el acceso al modelo del usuario final sino el uso de sus APIs por parte de empresas y startups. De momento, los ingresos están llegando.

Pero ¿será así? Tenemos los últimos Pixels, con una integración cada vez más fuerte de IA generativa junto a los planes de Apple o Copilot en Windows, Alexa pasando a modelos actuales más potentes… Y además será una integración fuerte, no va a quedarse en una “app” más del teléfono móvil, por lo que los actuales guardianes de la relación entre usuario y tecnología, los dueños de estas plataformas, pueden utilizarlas para copar la oportunidad de las startups.

Siendo así, el dispositivo con el que nos relacionaremos con la inteligencia artificial es una oportunidad enorme de negocio y un riesgo estratégico para OpenAI. ¿La oportunidad? Para la generación smartphone se unieron varias tecnologías: 3g y 4g, Socs más potentes para el móvil y encontrar la experiencia de usuario correcta (que es lo que se hizo en iPhone). Para la generación IA ¿seguiremos con este formato de pantalla con apps o es esta tecnología tan disruptiva que va a forzar un cambio en la relación humano-máquina?

Para muchos es una oportunidad de probar nuevos dispositivos e interfaces, también de hacer la necesidad virtud: OpenAI puede sufrir mucho si la inteligencia artificial se integra en los sistemas actuales. Sería como el “navegador por defecto” de esta generación.

Mientras desvelan proyectos, tenemos propuestas cerca de llegar al mercado como el pin de Humane (en foto) con micro, cámara y proyector o el colgante de Rewind. Veremos muchos más

¿Deberíamos seguir publicando en Internet de forma gratuita?

He compartido fácilmente más de un millón de mensajes en foros y foros. Pero Internet ha cambiado desde los años 90 y ahora nuestras contribuciones son desvalorizadas. Quizá no deberíamos…” Adam Singer se queda a gusto reclamando que dejemos de regalar tiempo y creatividad gratis en internet a las grandes empresas tecnológicas.

Creo que es un discurso que puede comprar un público cada vez más amplio de los usuarios más activos en plataformas. Este momento es fruto de un proceso ideológico que discutimos en “Hay chavales que solo piensan en monetizar cada segundo de su existencia” y también en los cambios operados en las grandes aplicaciones centralizadoras de la experiencia online, con la emergencia del “creador de contenidos”.

Mi posición es que es posible escenarios diferentes que el que Singer nos marca. Uno en el que no hay una gran plataforma “enshitificando” y en el que podemos participar sin acabar sintiendo que generamos para el engorde de un gran negocio del que no vemos un euro. Rechazo que todas las relaciones en la red acaben siendo mercantiles, aunque al mismo tiempo, si estoy en una plataforma de ingresos millonarios estoy en contra de que no se compartan con quienes generan el valor.

En parte, dedicar más tiempo a las listas de correo y blogs que a Twitter, Linkedin o Instagram es mi forma de llegar a un compromiso entre cómo quiero que sea internet y cómo entiendo que es (uno en el que el descubrimiento se produce en estos sitios centralizados).

Últimamente, junta a esta queja por el reparto de los ingresos, anoto una visión crítica (que por momentos llega a reaccionaria) respecto a la deriva de la participación online, especialmente con Twitter. Anotaría lo que recoge Juanjo Villalba en El Diario en “por qué muchos profesionales se sienten obligados a promocionar su trabajo en redes”: hay un giro desde el “en internet puedo tener marca personal que me permite tener una posición más fuerte respecto a empleadores y clientes” a “me siento obligado al autobombo, tengo que dedicarme al marketing de mi mismo en lugar de sólo hacer mi trabajo, me exploto más”.

Dos críticas más en la línea reaccionaria en New Yorker y de Ryan Broderick que apuntan a una suerte de maldición que no parecen poder evitar (prestar atención a feeds de las grandes plataformas cuya deriva detestan) y a una nostlgia de tiempos más controlados en los que como usuarios no éramos responsables del contenido y las personas que decidimos seguir.

La industria del coche europeo tiene un serio y eléctrico problema

El titular de Daniel Murias en Motorpasión resume muy bien la situación, “Volkswagen y Fiat pausan la fabricación de coches eléctricos porque la gente no quiere coches eléctricos, quiere Tesla”. El sándwich entre los chinos baratos y Tesla como estándar eléctrico está resultando en una fenomenal tormenta para la industria europea.

Los dilemas de nuestro continente no paran aquí. En Causas y Azares analicé cómo Europa tiene que decidir entre menos emisiones contaminantes, tener coches eléctricos baratos y proteger nuestra industria del automóvil, sin que parezca tener una solución clara.

Todo va a ser hackeado (mejor dicho, crackeado)

Después de muchos años he desarrollado lo que me parece la conclusión obvia visto el panorama de ciberseguridad: todo va a ser crackeado en algún momento. Esta semana teníamos el ciberataque a Air Europa, en el que el número de muchas tarjetas bancarias de clientes, sus fechas de caducidad y el CVV habrían sido filtrados.

Me llevé las manos a la cabeza pensando que Air Europa guardaba los CVV y habían accedido a la base de datos, pero finalmente parece que la hipótesis más probable es que haya sido un ataque “man in the middle”: los delincuentes conseguían que los datos del formulario se enviaran también a otro servidor.

Como consejo inicial pensaría en pagar siempre que se pueda con un ofuscador de la tarjeta, léase Google Pay, Apple Pay o PayPal; adicionalmente, tener en mente que en un momento dado, todo va a ser crackeado (que está mejor dicho que “hackeado” para este caso, pero es una batalla perdida me temo). Adicional, esto que apunta Serrahima.

Breves

Las viñetas de retroinformática de Jesús Martínez del Vas, compartidas en Twitter

Han circulado muchos vídeos de “la Esfera de Las Vegas”, también es muy interesante su ‘pitch deck’ publicitario: piden 450000 dólares por un día de publicidad. Interesante que apunten a que la audiencia potencial es de 300000 personas físicas y 4.4 millones en “social media”.

Nuevas competiciones como el Mundial de youtubers, La Velada del Año o la Kings League están modificando la forma de entender, de consumir, y también de comunicar, el deporte convencional. Sergio Moraleda y Alba López en As.

El MoMa de Nueva York acaba de adquirir esta obra digital:

A post shared by @refikanadol

“El crecimiento de las VPN pone de relieve la represión mundial de la libertad en Internet”. Se calcula que 1.600 millones de personas utilizan actualmente VPN, según Nikkei, “una reacción a la creciente interferencia de los gobiernos en Internet”

Related Articles

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Back to top button