Ya hemos hablado alguna vez en Genbeta de Jaime Gómez-Obregón: se trata de un hacker (en el buen sentido de la palabra) español especializado en fomentar la transparencia del sector público. En su momento, abordamos cómo se dio a conocer con el lanzamiento de su plataforma sobre la contratación pública en Cantabria…
…y, más tarde, con el de su web sobre las donaciones irregulares de Juan Carlos I. Recientemente, abordamos también cómo se las arregló para descargar datos legalmente públicos que el diseño de la web de Hacienda mantenía lejos de los ojos del público.
Dos horas de papeleo para cobrar una charla de 30 minutos
A veces, alguna administración pública ofrece algún destello de esperanza acercándose a activistas como Gómez-Obregón para conocer su punto de vista y aprender de él. Ayer mismo, Jaime tuiteaba que le habían contactado “desde una relevante institución pública [Nota del redactor: la Generalidad de Cataluña] para que participe en una videoconferencia sobre ‘digitalización’ con funcionarios”.
¿Cuánto tiempo podemos perder todos en este laberinto de ratas de los trámites administrativos?
Acabo de enviarles por correo postal, manuscritos en papel, los absurdos modelos legales que me piden.
¡Y que lo «digitalicen»! 😂#AdministraciónAmish pic.twitter.com/5fja5AUB3u
— Jaime Gómez-Obregón (@JaimeObregon) April 6, 2022
Y, la mayoría de las veces, ese destello de esperanza muere a los pocos segundos:
“Para una charla de 30 minutos me piden que haga dos horas de papeleo PDF y burocracia. […] ¿Cuánto tiempo podemos perder todos en este laberinto de ratas de los trámites administrativos?”.
Pero nuestro protagonista no ha decepcionado a sus seguidores. Y es que, cuando no es posible ‘hackear’, siempre queda la opción de ‘trolear‘:
“Acabo de enviarles por correo postal, manuscritos en papel, los absurdos modelos legales que me piden”.
Nótese que ha hecho más que eso: además de la documentación manuscrita, ha adjuntado un texto impreso en Comics Sans con la “Declaración responsable de pagar puntualmente la factura”, destinada a ser firmada por el presidente autonómico Pere Aragonès. Y para rematar:
“En Correos me han dicho que si es una carta «importante», la envíe certificada. Pero he decidido enviarla con franqueo ordinario. Las únicas cartas importantes son las cartas de amor”.
De primeras, parece que su contacto en la administración autonómica no se lo ha tomado mal, pero en un e-mail posterior le aclaraba lo siguiente:
“Dicho esto, y volviendo a temas procedimentales de nuestra querida administración pública, necesitaría que al menos el presupuesto y la declaración responsable nos las envíes por correo electrónico (la ley 39/2015 obliga a las personas jurídicas a relacionarse con la administración por medios electrónicos). […] Igualmente, la factura tendrás que tramitarla de manera electrónica. En este enlace tienes el acceso”.
— Jaime Gómez-Obregón (@JaimeObregon) April 6, 2022
El troleo
Llegados a este punto, Jaime Gómez-Obregón se ha visto obligado a sacar la artillería, y contestar con la siguiente carta manuscrita, remitida por “medios electrónicos” (es decir, escaneada y adjuntada como imagen en un e-mail):
“Muchas gracias por tu amable mensaje. Efectivamente, la ley 39/2015, del Procedimiento Administrativo Común de las Administraciones Públicas, obliga a las personas jurídicas a relacionarse con la Administración ‘por medios electrónicos’. Nótese, sin embargo, que la carta manuscrita que esta mañana he puesto en el correo procede de una persona física.
Dicho esto, y puesto que no encuentro en el articulado de la citada ley una definición precisa de qué se entiende exactamente por ‘medio electrónico’, me sirvo de componer esta segunda carta con papel y pluma, y enviártela fotografiada. En el fondo no es muy diferente de lo que hace la Administración Pública cuando publica listados escaneados de contratos menores, de deudores con la Hacienda Pública o de los bienes inmatriculados por la Iglesia. Yo mismo he invertido muchas horas en revertir el formato de documentos publicados.
En cuanto a los modelos que se me requieren, gustosamente los envío por ‘medios electrónicos’, concretamente en un ‘torrent’ (me refiero al protocolo informático, no al conseller). El manual de instalación y uso de Bit Torrent está a tu disposición en https://help.bittorrent.com. Como verás, el procedimiento no es muy diferente al de cualquier trámite de la Administración Electrónica.
Me pides que envíe firmada digitalmente la factura. En reciprocidad, te envío los documentos cifrados digitalmente y te copio a continuación mi clave criptográfica pública, quedando a la espera de recibir la tuya por este mismo medio.
—–BEGIN PGP PUBLIC KEY BLOCK—–
A continuación adjunta también su clave pública, un largo conjunto de caracteres alfanuméricos que, en combinación con el uso de las pertinentes claves privadas, nos permite cifrar y descifrar documentos.
Cuando Jaime menciona las “muchas horas” que ha dedicado a “revertir el formato de documentos publicados”, hace referencia a la molesta costumbre de imprimir y escanear documentos, y subirlos a la Red como imágenes dentro de un PDF, en lugar de limitarse a convertir en PDF en documento Word / Excel original.
Esto, que a veces se hace por mera desidia y costumbre, en algunos casos es intencionado, y tiene como objetivo dificultar un eventual análisis de los documentos destinado a extraer y cruzar datos.
El tuit, como habrás visto, ha hecho las delicias de muchos internautas y se ha vuelto viral y ya acumula casi 1000 retuits y 250 tuits citados, así como más de 32.000 ‘me gusta’.
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La noticia Harto de burocracia, este hacker ha dado una increíble respuesta a la Administración: tratarla como ella nos trata fue publicada originalmente en Genbeta por Marcos Merino .
